Fauna Nacional XVIII: los tocapelotas

No quería que el blog se convirtiera en el que podría tener un futbolero y por eso, aunque podría haberlo hecho al menos en 2 ocasiones (1 por cada título), no he escrito nada más sobre esta máquina de hacer fútbol desde aquel (ya) mítico 2-6...

Pero hoy no me puedo resistir:

· dicen que un entrenador no influye, que son los jugadores los que hacen un equipo...
· dicen que en el fútbol todo es a base de talonario...
· dicen que los equipos grandes sólo saben fichar a extranjeros...
· dicen que el fútbol no puede emocionar porque son 22 tíos en calzones corriendo detrás de un balón... (estoy ya hartito de la frasecita de las narices)

Pues que digan menos cosas, y que vean lo que ha pasado este año:
· un entrenador joven (JASP, como dirían las pijucas y los que se acuerden de qué eran estas siglas), con carácter, elegante, educado y estricto, que cae bien a todo el mundo y que ha logrado que un equipo (con el 80% de los jugadores del año pasado) pase de no ganar nada a ser el primer equipo español de la historia en lograr un tripletazo (marcando récords en liga, casi sin despeinarse en copa, y en Champions ganando a lo grande, incluidos 2 de los mejores de la pedazo liga inglesa)
· pues en parte sí (quién va a negarlo) pero es probablemente uno de los equipos con más gente de la cantera de toda la 1ª división
· este año ha sido de los equipos con más españoles (y no me vale lo de "bueeeeno, españoles españoleesss... digamos más bien catalanes" que dicen muchos tarados).
· pues si no te emociona (y quien dice emocionar dice poner nervioso, o contento, o furioso, o muerto de un ataque al corazón) nada de lo que ha pasado este año, amigo, es que por dentro estás hecho de piedra caliza.

Peeeeeero, como luego me critican por no criticar (?), como ya me pasó una vez, pues ahí va mi ración de quejas.

¿Metidas con calzador? Juzguen ustedes mismos.


A pesar de que se suponga que es un momento de felicidad y alegría, siempre siempre siempre aparecerá el antihéroe más famoso de todos los tiempos, el que enarbola la bandera de la estupidez y el fracaso, el que por dentro sólo está compuesto de bilis y ácidos estomacales... encarnado en una de estas gentucillas:

1) Los de "el fútbol es el opio del pueblo":

Son los de "el-fútbol-es-el-opio-del-pueblo-y-todos-estáis-ahí-como-tontos-mirando-un-partido-cuando-hay-cosas-mucho-más-importantes-en-la-vida-como-el-hambre-en-África,-el-paro,-o-el-dolor-cervical-de-las-hienas-peladas-de-la-península-de-Amic_emein_porta"

Vale (pesado), que no lo dudo. Que el fútbol no es lo más importante de mi vida. Que si tengo que no-ver el partido de ayer [el más importante de los últimos años, el (a priori) más bonito y justo de toda la Champions, el colofón a un año estupendo, en el que mejor fútbol se iba a ver, y blablabla] por algo más que sea importante, pues no lo veo. Y no pasa nada.

Pero (plasta) si a mí me gusta que gane el equipo que me gusta que gane, pues déjame en paz. No me vas a quitar ni un gramo de alegría, pero vas a acabar consiguiendo que te coja TIRRIA, y que cada vez que oiga "es el opio del pueblo" me den ganas de machacarte con un mortero gigante.

Además (cansino):
¿acaso me meto yo con tus aficiones?
¿acaso cuando te emocionas escuchando canto gregoriano chill out versión remix de Camela me pongo yo a decirte nada (cuando, evidentemente, podría)?
¿acaso te digo yo algo cuando muchos dices de que los demás hacemos todos lo mismo (ver fútbol en este caso) pero tú eres el primero que hace miles de cosas sólo por que los demás las hacen (empezando por tu ropa o peinado, y acabando precisamente por querer ir taaaaaaaanto contracorriente con comentarios como ése del opio que es lo que todo guay que se precie tiene que hacer)? Y créeme, guays hay muchos, muchísimos. Y que se creen guays como tú, ni te cuento.

Y además (chapas), eres tú el primero que cuando el Barça pierde va a picar a la gente...
¿pero no era el opio del pueblo?
¿osea que ahora sí te importa?
¿casualmente cuando gana siempre dices que ni te habías enterado de que había un partido (cuando con partidos como el de ayer llevaba siendo noticia de portada toda la semana) pero cuando pierde eres el primero que lo sabe todo?

No cuela.

2) Los chinos:

¿Qué tengo yo contra los chinos? Nada, por eso está en cursiva, porque no son los chinos, sino los chinos, aquellos cuyo tono de piel se ha vuelto amarillento de tanto amarillismo que gastan cuando trabajan como pseudoperiodistillas.

Son éstos que, en plena celebración, empiezan a sacar mierda de todos, de forma que, como todos los titulares del día siguiente van a ser iguales, si ellos sacan mierda de donde no la hay, ya pueden decir que han hecho un trabajo de investigación arduo y trabajado y sacar la mierda en portada.

Ejemplo1: 
los jugadores abrazados en el campo, y se acerca la del micro, y empieza a rebuznar:
- Felicidades, blablabla...
- Pues sí, blablabla...
- Ajá, bueno, y ¿qué opinas de las acusaciones que se te hacen por aqueeeellas declaraciones que hiciste hace 94587 meses, en las qué insinuaste que las mujeres eran diferentes a los hombres?
[Por suerte los futbolistas tampoco tienen mucho problema en regatear preguntas-mierda]
- Sí, bueno, aquí estamos, felices por el título que se lo dedico a toda la afición, blablabla

Ejemplo2:
- Bueno Guardiola, ¡el triplete!
- Sí, bueno, blablabla
- Ajá. Bueno, y ¿el año que viene qué vas a hacer para superarlo?, porque es muy difícil...

A ver, pánfila, déjale en paz con el año que viene.. ¿tú crees de verdad que está pensando en el año que viene? Es más, ¿tú crees de verdad que en ese momento está pensando?
Tú nunca has ganado ni al parchís verdad... ¿qué tal te sentaría ganar al parchís y que te dijeran "bahbahbah, a ver qué haces en otra partida..."?

3) Los bengalas:

Esta gente es casi hasta más odiable.
Se supone que salen a celebrar algo, pero en realidad lo que hacen es salir a destrozar papeleras, quemar contenedores, enfrentarse a la policía...puf.

Que vale que estés contento.
Vale que bebas algo.
Vale que si vas con el coche hagas la de pitar "pi, pi, pi-pi-pi, pi-pi-pi-pi, pi-pí".
Vale que empieces a agarrarte a los de alrededor y botar y que parezca que la prima multimillonaria que dan a los futbolistas en realidad te la van a dar a ti.
Pero de ahí a destrozar cosas...

¿Qué se gana con romper cosas? Pues ya te lo digo yo: mala fama, pelotazos de goma y porrazos de la policía, y futuras prohibiciones de hacer cualquier cosa... ¡payasos!.

Éstos son también los que entran con bengalas a los estadios (cuando están prohibidas, y si no que alguien se acuerde de aquel pobre chiquillo que murió en brazos de su madre con una bengala clavada y ardiendo en su cabeza hace pocos años...). Tíos, haced como todos, y haced trizas el periodiquillo que dan en el estadio, y ya tenéis confeti.



En fin, lo de estas gentes son estas pequeñas cosas que te hacen de verdad plantearte un sistema educativo que se vuelva a basar en los reglazos en las manos y los capones indiscriminados.