Fauna Nacional XXI: los melan


Muy bien deducido, chicos: "melan", de melancólico. Ni es la esposa del melón, ni como llama Antonio Banderas a su churri, ni alguien que tenga sólo un poquito de cáncer de piel, ni uno que sea muy tonto y no haga más que decir "melán dao con queso".

Este subgrupillo de nuestra Fauna Nacional se caracteriza por eso, por ser unos melancólicos.

Quizá, más que serlo, lo que le mola a esta gente es aparentarlo, porque da ese status de uh-mira-cómo-soy-de-intenso... que a ti lo que más ganas te da es decirles una de esas comparaciones tan guays de "eres más intensorrll que el tío de Redes entrevistado por Quinteroorrll".

Porque, en esta vida, se pasan malos ratos. Por ejemplo, cuando tu pareja te deja:

- "Oye, cari..." - dice ella, por ejemplo (vale, lo sé, siempre lo hago desde el punto de vista del tío, pero por algo soy El Señor X).
- "Dime, barati..."
- "Tenemos que hablar"
- "... no... deja... ya si eso otro día..."
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Inciso1:
yo es que soy nuevo en esto, pero ¿desde cuándo "tenemos que hablar" se traduce automáticamente por "te estoy dejando"? ¿es culpa de las pelis y series?
¿Qué hay que hacer ahora para introducir la conversación sin que se sepa directamente cómo va a acabar: "cari, ven que dialogamos"?
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- "No, cari, es que [insertar aquí alguna de las siguientes razonexcusas: yanoeslomismoporquesehaperdidolapasióndelprincipio, heconocidoaalguien, ahoratengoquecentrarmeenlosestudiosotrabajo, siemprehecreídoquepuedoaspiraramásquealamierdaquetúeres, cadavezqueteveovomitodelascoqueteestoycogiendo, noerestúesqueahoramevanlosbueyesmarinos, meheconvertidoenungeranioyahoramereproduzcoporesquejes, etc.]"
- "Que no, cuchicuchi, de verdad, que puedo cambiar..."
- "Que no, plasta"

[Como se puede ver, una situación real como la vida misma]

Bien, pues en este punto tienes 3 reacciones posibles:

1) La normal:

· Estar más depre durante unos días que el botón de internet del móvil (ése que todo el mundo evita y que si lo tocas por accidente empiezas a cagarte en él).
· Tirarte en la cama, no querer hablar con nadie y poco a poco empezar a recuperar tu vida de a.C. (antes de Churri), hasta que finalmente puedes volver a hablar del tema, recordando siempre a tu Churri con cariño y añoranza.

2) La habitual:

· Enfrascarte en una espiral de descontrol sin control, saliendo de lunes a domingo hasta las 8 de la mañana, con más ganas de juerga que Duffman después de tomarse unos tripis, negando en todo momento que la guarraaaaacaaaaa de tu ex te importe ya lo más mínimo, que por fin eres libre.
· Eso sí, cuando se te pase el efecto del alcohol, llorarás, y lo sabes tú y lo saben hasta los gecos, pero bueno, finalmente y después de mucho tiempo, acabarás superándolo.

3) La melan:

· Releer todos los mensajes de tu churri una y otra vez
· Ver sus fotos en el móvil y ponértelas de fondo de pantalla del móvil y del ordenador
· Imprimir y enmarcar sus e-mails
· Escuchar durante toooooda la noche una y otra vez "esa" canción
· Comprarte su colonia favorita para poder olerla a escondidas
· Pintar un cuadro abstracto que represente mediante furiosos trazos y delicadas ondulaciones la tortura de tu alma vacía
· Escribir la poesía más romántica del mundo para luego doblarla en forma de barquito del amor y echarla al mar con la esperanza de que el destino encuentre un mejor destinatario para ella
· Y etc., creo que ya se ve por dónde va esto

Vale, es posible que alguna (no muchas) de estas cosas las hayamos hecho más o menos todos. Peeeeero, realmente algo diferencia a un melan:

Un melan es aquel que se regocija en su propia melancolía... aquel que la utiliza como causa y consecuencia de todos sus actos... aquel para el cual la melancolía es a la vez la espada de su harakiri y el bálsamo de su curación.

Y además, si de paso todo el proceso de melan-manía lo puedes hacer público, para que todos (y todas, que apreciarán mucho más tu intensidad abrumadora) lo vean y se compadezcan, pues mucho mejor.

Es decir, tú te podrás ir a recitar a Bécquer a orillas del mar bajo la luz de la luna tú sólo, para calmar el agobio de amor que sienta tu alma incompleta... ooooo podrás ir a recitar a Bécquer a orillas del mar bajo la luz de la luna tú sólo, para calmar el agobio de amor que sienta tu alma incompleta, y después soltarlo en la primera conversación que tengas con otros, como sin venir a cuento.

- "Bueno, ¿cómo quedó el Madrid ayer?"
- "Oh... "- y poniéndose el dorso de la mano en la frente mientras entorna la mirada hacia el horizonte - "pues yo no lo sé, porque ayer estaba tan destrozado por dentro, tan trágicamente sesgado en mi interior, que me fui yo sólo a recitar a Bécquer a orillas del mar bajo la luz de la luna, para calmar el agobio de amor que siente mi alma incompleta".

En ese momento, a los tíos presentes les subirá una arcada que desembocará en cascadas y cascadas de vómitos, pero algunas chicas entonarán ese "ooooooooooh, pobrecito, qué trágico e interesante te has vuelto de repente..."

Y ya.

Ay, melans de la vida, creo que os habéis equivocado de época, que la vuestra es el Romanticismo, cuando la gente estaba tan afectada por su propio ideal de amor que siempre acababan con un destino tan trágico como el que merecían, por pedantes.

2 comentarios:

El Alcalde de Albuquerque dijo...

Ay, Sr. X... cómo me encanta este Post. Hoy lo he leído a la vuelta de un largo paseo a la orilla del Sena, que me ha llevado hasta Montmartre, donde he estado tres horas y media contemplando la sombra de una pluma que se proyectaba sobre un adoquín con forma de estrella...

...pero estoy divagando, el hecho es que me encanta este post!

Saludos institucionales

ElSrX dijo...

Ay, alcalde... ¡gracias! Lo cierto es que todos somos un poco melan, pero ¿usted también? ¡quién lo diría!.

Aunque claro, la sombra de una pluma proyectada sobre un adoquín con forma de estrella es la sombre de una pluma proyectada sobre un adoquín con forma de estrella... y claro...

¡Besos ancianos!

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