Átomos apilados



¿Un golpe en la cabeza?
¿Un madrugón de espanto?
¿Unos chocotripis para desayunar?

Quién sabe, quizá una combinación de todo es la que me lleva a desvariar un poquito hoy, como ya me ha ocurrido alguna que otra vez.
Así a ojo, recuerdo un puntito azul o una peli de Pixar...

Pues bien, pretendía poner un poco de cordura... bajando la escala de las cosas, empezando por el archiconocido ejemplo de que un diamante (que cuesta a testículo de mono) básicamente es lo mismo que la mina de grafito de un triste lápiz, solo que un poco más aplastada.
Es decir, que si enterramos un muchillón de minas de lápiz y lapicera en un sitio y lo sometemos a suficiente presión durante mucho tiempo, obtendremos unos muchillones de diamantes... claro que por "suficiente" presión se entiende una barbaridad que solo la Tierra es capaz de dar y por mucho tiempo significa muuucho más que una vida humana. Porque si se hacen con máquinas, resulta que no quedan de la misma calidad.
Pero bueno, a lo que voy es que un diamante y un cacho de grafito es la misma cosa, formada por los mismos átomos y que sin embargo tiene un valor en la sociedad "ligeramente" diferente.

A efectos prácticos, podemos considerar que los átomos son piececillas de LEGO (que no se pueden partir en 2, ¡ni lo intenteis!) y que por sí solas no dicen mucho, pero que junto a muuuuuchas otras piezas pueden componer cosas realmente espectaculares.


Pues bien: todo (bueno, venga, casi todo) está compuesto con átomos, y el número de átomos diferentes no es tan elevado, basta con echar un vistazo a la tabla periódica... es decir, que los átomos de nitrógeno que tenemos nosotros en nuestro cuerpo (y tenemos muchos, y si no recordad la biología del cole...) son iguales igualitos que los átomos de nitrógeno de la estrella que está más perdida por el universo.
El carbono de mis células es igual que el de uno de Zimbawe, igual que el de una ballena, igual que el una planta e igual que el de una piedra.

¿Entonces?

Pues entonces lo único que diferencia las cosas unas de otras muchas veces es solo la forma de colocar dichos átomos. Es decir, si me das unas tijeras y un pegamento suficientemente bueno, puedo coger tu cuerpo y convertirlo en lo que quiera: piedras, otros seres vivos, un libro... quizá no podría convertirte en un iPad, por ejemplo, que me faltarían elementos raros, pero vamos, por lo demás...

Y esto le hace plantearse cosas a uno:
· Vas a una fábrica de coches, a la zona de montaje, y ves cómo hay gente que junta unas cosas con otras (y sobre todo muuuuuchos robots que juntan unas cosas con otras), y vas siguiendo la línea y cada vez "eso" se parece más a un coche. Pero entonces llegas al final de la línea y se produce un pequeño milagrito: ensamblan la última pieza y a los 3 segundos el coche pasa a la zona de pruebas... ¡y arranca! ¡¡È un miracolo!! Ciertamente sorprende.
Y la pregunta es: ¿desde cuándo eso se puede considerar coche? ¿Cuando solo es un bastidor? ¿Cuando tiene asientos? ¿Cuando es capaz de desplazarse?

· Y por analogía obvia: todos nosotros somos un montón de átomos ("¡vámonos, átomos!") apilados, algunos mejor apilados que otros, tengo que añadir... ¿y entonces? ¿en qué punto se puede considerar persona a una persona? ¿si se mueve? ¿si está completa? ¿entonces un manco no es una persona?

Bien, parte de esto es aplicación directa de la paradoja de Teseo, que se pregunta si cuando a un objeto se le reemplazan todas sus partes, éste sigue siendo el mismo objeto... por ejemplo, los calcetines de Locke (no el de Perdidos, sino en el que se inspiró su nombre):
Tienes un calcetín y le sale un agujero. Le pones un parche y en principio sigue siendo el mismo calcetín. Pero le sale otro agujero y le pones otro parche. Y si, varios años más tarde (se ve que eres un poco pobre y que ni un par de calcetines te puedes permitir) si todo el material del calcetín "original" ha sido sustituido por parches y remiendos... ¿ya no es ese calcetín? ¿Entonces en qué punto ha pasado a ser otra cosa?
Bien, eso por un lado.

Y por otro, ¿no hace tener un poco de humildad y perspectiva el hecho de saber que, en efecto, somos todos iguales?
[Está quedando esto como una chupichachi clase de Religión de primaria...]
¿No se reduce un poco la importancia de las cosas, sabiendo que al final es lo mismo un diamante que una piedra?
¿No parece después un poco estúpido dar valor a las cosas por lo que representan y no por el valor que realmente tienen?

Por eso mismo, miedo da el día que consigamos (que lo haremos) construir cosas a partir de la materia prima.
Es decir, una "impresora" total, que por un lado le metas cartuchos con átomos, y por otro lado te salgan cosas.
Igual que el IBM hecho con átomos, podremos "crear" a partir de ladrillitos una piedra... un diamante... un iPad... ¿y una lagartija? ¿bastaría con poner sus átomos igual que en otra lagartija que tomáramos por modelo?

¿Y un ser humano? ¿podríamos copiarnos (que no clonarnos, yo digo copiar átomo a átomo, no engendrar otro ser humano con igual ADN...)? ¿acaso solo somos átomos apilados? "Eso" que crearíamos... ¿tendría sentimientos, consciencia de sí mismo, personalidad? ¿seríamos la misma persona? ¿pensaríamos igual? ¿estaríamos conectados de alguna manera?


Y para los que (a pesar de todo) hayáis llegado hasta aquí, os diré que gracias por aguantarlo y por consentir que, aunque sea una vez cada mucho tiempo, de vez en cuando me pare y haga como que pienso en cosas... ¿importantes?

4 comentarios:

Guybrush dijo...

Una entrada muy interesante. Creo que la volveré a comentar mas tranquilamente en breve.
Solo apuntar que como paradoja de cuando una cosa deja de serla a mi siempre me ha encantado la del renacuajo.
Si tu grabas la evolución de un renacuajo en rana y la representas con una sucesión de fotogramas. Tendríamos que ser capaces de decir en que fotograma es renacuajo y en cual es rana? Podríamos marcar claramente donde se produce el cambio?
Creo recordar que para este tipo de situaciones de cambio continuo hubo quien propuso aplicar el concepto de los porcentajes. Es decir, que Locke, en el momento del primer agujero dejó de tener su calcetín y pasó a tener un % de calcetín y otro % de parche, así hasta dejar de tener calcetín y tener un 100% de parche.

Saludos!

P.D.: Venga, que ya casi me he puesto al día con el blog :D
P.D.2: Venga, vámonos!

ElSrX dijo...

¡Gracias hombre!
Muy bueno lo del renacuajo y lo de los porcentajes (no tenía ni idea, ¡me gustaría encontrar tiempo para leer sobre todas estas cosas!)... pero entonces, ¿habría que darle al "ser" un X% de renacuajez y un 100-X% de ranez?

PD: ciertamente, has ido a muy buen ritmo ;), ¡gracias por comentar tanto!

Guybrush dijo...

La teoría que se comentaba en el libro (si puedo localizaré el título, pero lo veo complicado de momento) era esa, la de asignar porcentajes, en este caso de ranez y renacuajez, sí.
El libro en sí (este 'si' es con acento o no?) muy interesante, versaba mayoritariamente sobre diferentes paradojas y las resoluciones más aceptadas, y como muchas de ellas han dado pie al nacimiento de diversas teorías matemáticas totalmente aceptadas hoy en día.

ElSrX dijo...

Pues seguro que es un libro bien interesante... yo lo poco que he leído sobre paradojas ¡me encanta! Te hace pensar y eso siempre es bueno, y si hace pensar a gente lista, pues como muy bien dices gracias a ello surgen teorías matemáticas.

PD: ese "sí" con acento, ¡perfecto! (lo dice la RAE...

Publicar un comentario

Aquí puedes comentar todo lo que quieras