Neuronas... para qué os quiero?! (XVIII): pulseritas

Asistimos cada día a una espectacular demostración de que la raza humana cada vez da los pasos más largos y rápidos al encaminarse hacia la tontuna absoluta.
Bueno, mejor dicho: en conjunto la raza humana tiende a peor, pero siempre hay gente ¿lista? ¿listilla? que se aprovecha de la borreguez reinante.

¿Hablo de los comentarios que la gente pone en cualquier vídeo de YouTube? Pues también (que yo no sé qué pasa, pero la gente se vuelve retrasada/analfabeta/violenta cuando comenta vídeos... pero eso ya para otro día)

Claramente, hablo de lo de "compra esta pulsera que tiene efectos milagrosos", en sus muchas variantes:

Pulseraca que era un aro de metal que acababa en 2 bolitas

Las juventudes más jóvenes no las recordarán, pero estas pulseras (Rayma), además de ser más feas que regalarle a tu madre una caca de gato, resulta que tenían propiedades curativas, como curarte los dolores (¡de todo! dolores de espalda, dolores cervicales, dolores de muñecas, dolores mentales, dolores de estómago, dolores de cabeza, dolores de cospedal..., artritis, artrosis, artrositis, cáncer, sida, hepatitis... una maravilla, oiga).

Pues bien, parece que al final a los fieras que hicieron y comercializaron estas pulseras asegurando que tenía todas esas propiedades (bueno, igual no todas ésas, pero casi casi) les metieron un puro de algún milloncejo, porque (efectivamente) todo lo que arreglaba esa pulsera era el bolsillo del que la vendía.
Eso sí, por la calle las señoras la llevaban y ASEGURABAN que desde que la llevaban se sentían mejor, les dolía menos los huesos, los nietos les comían mejor el pollo (que no la...) y el banco les regalaba licuadoras mejores.

Puesss, uno pensaría que después de esa "experiencia", la gente habría espabilado... pero no.

¿Pulsera? de silicona

Hace ya poquito, se puso de moda lo de llevar una pulsera/cacho-silicona de la organización contra el cáncer o algo así.
Pues mira, esto ya no me parecía tan mal, porque parte de lo que pagabas (que no era poco) por la pulsera, iba destinado a investigar o ayudar o algo contra el cáncer.





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Culturizando 1:
El cáncer (la enfermedad) se llama cáncer (al parecer) porque en latín significa "Cangrejo", y que cuando se empezó a analizar los tumores se vio que tenían una forma y una manera de adherirse a los tejidos similar a como los cangrejos agarran a sus presas, con el mismo patrón agresivo.
Así que parece que no tiene más que ver con el signo zodiacal que el propio nombre: constelación del cangrejo o cáncer.
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Bueno, pues eso bien. Aunque bueno, depende. Porque el plan es que, llevando esa pulsera, la gente la viera, como forma de dar publicidad a la organización y así ayudar, PERO la mayoría de la gente lo llevaba en plan:
a) "mira qué generoso soy, ¿eh? mira, mira, mira, mira".
b) "¿que dices que esto ayuda a quién? yo la llevo porque todos lo llevan, ahora es cul".
c) "yo colecciono pulseras de colores. Ahora mismo tengo 2495. Pero no me las pongo, que no me gustan".
Pero además resulta que luego salieron miles de pulseritas de colorines varios y propósitos varios, la mayoría de ellos consistentes en timar al personal con imitaciones.

Por suerte, el boom pasó rápido, y ya se pensó que la tontería de las pulseritas había acabado... hasta ahora (chan chaaaaaan).

Pogüerbalans (a.k.a. no-me-puedo-creer-que-hayamos-avanzado-tan-poco-por-dios)

Claro que sí.
A algún genio (esto sin comillas, porque si eres capaz de hacerte multimillonario así sin más tienes que ser un genio) se le ocurrió... trrrrrr trrrrr trrrrrrrrr ¡mezclar las 2 soluciones anteriores! ¡Claro!




· La pulsera metálica era muy fea, pero lo del magnetismo-cura-todo mola, porque claro, COMO NO SE VE, la gente se cree que el magnetismo hasta te hace más guapo...
· La pulsera de silicona también era fea, pero cómoda, porque no pesa y además se puede hacer de colorines... pero claro, no hace nada y es muy fácil de falsificar...

Así que la solución (obvia) es hacer una pulsera de silicona, pero con "cosas invisibles" que interaccionan con tu "campo de energía" (pffff) para mejorar tu estado físico y (se)mental.

Bien, pues por ahí se asegura que estas mierdas hacen todo esto:
mejoran el rendimiento deportivo, disminuye el tiempo de recuperación, incrementa la flexibilidad, la fuerza, el equilibrio, la energía, la resistencia y la concentración, reduce el dolor de lesiones, disminuye el estrés, las enfermedades motrices y la influencia de los campos electromagnéticos.
Fíjate si será buena que ha sido prohibida en competición (otra leyenda urbana, pero igual de verdadera que todo lo anterior)

Bien, pues no. Mentira. Falso. Timo. Lo siento, pero un cacho silicona con un holograma no hace nada.

Atención a lo que pone la página oficial:
"Cuando el holograma Power Balance entra en contacto con el campo de energía de tu cuerpo, empieza a trabajar en sintonía creando un lazo armónico que optimiza tu campo de energía y mantiene el flujo de energía máxima, mientras que limpia las vías de compensación para que el electro-intercambio químico funcione como debe ser".

¿¿quéé??¡Pero venga hombre! Vete a tomar por saco.

A mí todo eso que dice cosas de los "campos de energía" del cuerpo... pues qué quiere que te diga, me tira p'atrás.
Pero ya que me digan que un holograma (que es lo que llevan los DVDs Disney originales, por ejemplo), interactúa con la frecuencia natural de mi organismo, pues mira, no.
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Culturizando 2:
Que yo mucho no sé, pero lo que sí sé es que la frecuencia natural (w) de las cosas depende de su masa y de su rigidez (m y k), w=raíz(k/m)
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Dudo por tanto que la frecuencia natural mía (que peso 340kg o más) que activa la mierdecilla ésta de holograma sea ni remotamente parecida a la de esa chiquilla de 40kg.

Pero bueno, pasando.

Si quieres gastarte 35€ (¡¡¡35 euros!!!) en una pulsera, pues mira, cosa tuya. Bien libre eres de gastártelo, e incluso bien libre eres de decir que te está curando la miopía, pero NO esperes que yo me lo crea.
Yo sigo pensando que para mejorar la resistencia, el equilibro y la madre que te parió, lo mejor es hacer ejercicio, pero por suerte para las teletiendas, los timadores y los genios de vender mierda a precio de diamante, hay mucha gente que prefiere que le vendan mierda a precio de diamante.